jueves, 7 de marzo de 2013

Una Tenida no muy ordinaria

UNA TENIDA NO MUY ORDINARIA
M:.M:. Gerardo Antonio Bouroncle Mc Evoy
Al sonar mi teléfono ayer por la noche, una voz entrecortada alcanzo a decirme:“hola soy la esposa de Maurice, tu hermano de logia; quisiera pedirte un favor y espero que quede aquí”.
Muy sorprendido le pedí a esta hermana que se calmara y que además estaba dispuesto a ayudarla en lo que quisiese…………….la conversación siguió y escuche atentamente………..”Mira G., tu hermano anda muy deprimido por cuestiones de trabajo, hay ciertos problemas y eso está repercutiendo en nuestra relación, me gustaría que converses con él y trates de calmarlo”.
Luego de unas cuantas palabras más me quede intrigado; mi hermano lleva muchos más años que yo en la orden, se expresa muy bien en nuestras tenidas y muestra mucha sapiencia en su discernir. Entonces ¿porque en su vida diaria eso no va bien?
Ya por la tarde y Durante la tenida, me encontraba sentado en mi puesto en logia, por un momento recordé la conversación telefónica; y sin querer comencé a inspeccionar a cada uno de mis hermanos pero los comencé a imaginar a cada uno sin atuendos y sin mandil…………….
Sorprendido………..vi a un hermano con serios problemas de obesidad
A otro lo vi durmiéndose
A otro lo vi jugando con su teléfono
A otro lo vi tomando sus pastillas para la presión
A otro lo vi que transpiraba excesivamente
A otro lo vi con una tos terrible
A otro lo vi mirando su reloj cada tres minutos
De pronto volví en mí; ¿que está pasando aquí? Vi a mi hermano Maurice con una expresión de tristeza que casi me contagia. De pronto un hermano se puso de pie y dijo: os agradezco por el refrigerio espiritual de hoy RR:. y QQ:. HH:.
Me quede pensando: “¿Eso significa que estamos alimentando nuestro ser interior con las experiencias de nuestros HH:. para poder aprender a ser cada día mejores y poder manejar mejor nuestras vidas allá afuera?”.
Con una sonrisa abrace a mi hermano Maurice al terminar la tenida y me dijo: ¿Como haces G. para que nada te perturbe y estar de buen humor casi siempre?
Mira le dije: “Te imaginas que yo te diga que no metas tus dedos al enchufe porque te puede pasar corriente? Pues te lo digo porque a mí ya me paso y no quiero que eso te pase a ti, sin embargo tu solo vas a vivir con el temor de no meter los dedos y evitaras algunas cosas, siempre vivirás temeroso por mi propia experiencia más no con la tuya…………Quizás sería bueno que metas el dedo al enchufe y sientas ese golpe de corriente para que sepas de qué te hablo”.
Con expresión de desconcierto quiso pronunciar una palabra pero interrumpí:
Mis experiencias me han demostrado que tengo que enfrentar ciertas cosas, mi vida me ha enseñado y en base a ello puedo madurar emocionalmente y puedo adquirir herramientas para enfrentar mis temores, mis dudas, mis debilidades………… y a mi piedra.
………….Continué:
¿Cómo es posible que me encuentre en este templo y no cuide mi cuerpo, no cuide mi salud, mis emociones, mi trabajo………….mis relaciones con mi esposa, con mis hijos, con mis amigos………………..como es posible llamarme Masón y sentarme en la sala de mi casa con un vaso de whiskey en la mano y deprimirme…………….?
La respuesta es simple………………….porque no has metido los dedos al enchufe, porque no has aprendido nada, porque eres de los masones que dice orgulloso: Sigo siendo un aprendiz porque sigo aprendiendo!!!
¿Te has dado cuenta que yo nunca digo eso?..................yo vine a aprender de Masonería, no a ser Masón……………..Masón es el que nace y descubre con su trabajo diario en logia como es que debe ser Mejor cada día de su vida y enseñar con el ejemplo. Sientes que estas estancado en tu trabajo? Sientes que no puedes cuidar tu salud? Sientes que un plato de comida o una bebida pueden más que tú? Sientes que es mejor no dirigirle la palabra a tu mujer para que no te haga sentir peor?...............................si sientes eso……………….entonces quítate ese mandil y volvamos a iniciarte, porque si no viste esa primera luz……………..aquí nunca la vas a encontrar.
Mete tus dedos al enchufe de una vez por todas y siente esa corriente que te hace daño y que no debes volver a sentir nunca más en tu vida, siente que eso que te ha perturbado es un simple hecho y que no va a cambiar tu vida, ni tu carácter, ni nada que hayas trabajado arduamente con tu cincel y tu martillo.
No se trata de compartir experiencias, ni vivencias, ni trazados……………. se trata de aplicarlos a tu vida diaria, dar ejemplo que lo que lees eres “tú”, es por ello que un trazado debe ser original, escrito con el corazón, escrito con tu experiencia de vida, pero sobretodo con tu desempeño en el mundo profano en donde te vas a distinguir por ser una persona distinta y los demás se pregunten ¿Por qué eres distinto? ………….Porque al aprender de Masonería descubrí el Masón que soy por dentro…………………….pero si acudes a tu Logia y sales igual, entonces no solo no has aprendido nada, sino que lo más triste sería que descubras que aquí se trabaja en vano y no eres Masón……….¿te das cuenta que tenemos “El libro Sagrado” en nuestras tenidas?..........................sabes que dicen esas miles de palabras?:
“Ama a tu prójimo como a ti mismo”………………….todas las paginas dicen exactamente lo mismo pero de distinta manera……………..Sabes cuál es el trabajo de un Masón? Amar a su prójimo como a si mismo…………………te das cuenta que cualquier trabajo de un masón cualquiera que fuese el título dice exactamente lo mismo???? Que todas tus herramientas son para eso mismo?
Hermano…………………anda mete los dedos al enchufe y siente lo desagradable que es una descarga de corriente; siente lo terrible que es la vida sin valores, ni virtudes; pero sobretodo sin esperanza y tú mismo date cuenta que eso es lo que aquí “no se busca”.
Luego de mi larga charla abracé nuevamente a mi Hermano Maurice: quizás no me comprendas, quizás si…………..hoy es una tenida muy especial, de esas que deberíamos tener más seguido, de esas que un hermano le dice a otro hermano……………………..”Salgamos adelante juntos”
A la mañana siguiente volvió a sonar mi teléfono; era mi hermana: “Hola G. hoy después de muchos días he vuelto a ver la sonrisa de Maurice en su rostro y el sol ha salido por mi ventana”.

lunes, 31 de diciembre de 2012

el fin del mundo

EL FIN DEL MUNDO
M:.M:. Gerardo Bouroncle Mc Evoy
Hace Una semana en una charla a la que fui invitado, en tono de broma a mis oyentes les dije: “Bueno, esta es la ultima charla que voy a dar porque mañana se acaba el mundo”, entre risas y bromas empecé mi charla diciendo:
“Si el mundo se acabara mañana pues tendríamos que hacer un balance de lo que el ser humano ha hecho a lo largo de la historia de la humanidad; entonces si solo queda un día de vida pues resumamos en un solo día que ha hecho el hombre en tantos miles de años. Si el día tiene 24 horas, pues dividámoslo en tres partes de 8 horas cada uno (así como nuestra regla de 24 pulgadas):
-8 horas ha empleado el ser humano en matar a otro ser humano.
-8 horas ha empleado el ser humano en dormir, descansar y tratar de no hacer nada.
-8 horas el ser humano a empleado en inventar cosas para vender y que el resto pueda comprar, es decir en el “consumismo”.
Esto significa que la mayor actividad del ser humano ha sido en destruirse física y moralmente no solo asesinándose sino volviéndose dependiente de sus propias necesidades, ya que no solo ha empleado tiempo en matar a otro ser humano sino que esas horas del consumismo las ha ocupado también en inventar y vender artefactos desde los más rudimentarios hasta los más sofisticados para poder matar a otro ser humano en las guerras o como parte de su defensa personal.
¿Visto de esta manera, sería absurdo pensar que el mundo deba destruirse ya? Si pensamos que seguimos en el mismo camino pues ¿no debería de terminar de una vez por todas la humanidad?
Cuando termine mi charla; muchas personas me miraron con extrañeza, como si hablar del apocalipsis o del fin del mundo no fuera nada descabellado. Entonces pensar ahora en el fin de la humanidad como la conocemos debería darse en cualquier momento debido a que seguimos en el mismo camino; siguen habiendo guerras en el mundo y se siguen construyendo armas para poder matar a más gente a menos costo y de manera más globalizada.
Suena ridículo y hasta absurdo lo que digo, sin embargo es real. Al final la actividad más grande del ser humano a través de la historia ha sido “matar a otro ser humano”. Visto de esta manera y sin ser adivino, pues yo podría pronosticar que los próximos 100 años el ser humano inventará tecnología muy sofisticada en armas de guerra y nuevas formas de matar a otro hombre en las guerras que nunca cesarán. Y si a mí se me ocurriera convertirme en “Nostradamus”por un momento, podría hasta predecir el futuro:
-En algunos años el ser humano construirá armas de aniquilamiento con rayos especiales.
-El ser humano volara en naves supe rápidas de un continente a otro, para poder así llegar y matar más rápido a otro ser humano.
-Se inventarán dispositivos pequeños que se adherirán al oído y con tecnología de celular uno podrá hablar sin teclado. La gente parecerá que tiene“telepatía” habla con muchas personas a la vez sin moverse de su sitio.
-El hombre se irá a otro planeta y colonizará este ya que la vida en la tierra será demasiado hostil.
-Los gobiernos dependerán de una cúpula mundial y se generarán gobiernos de Resistencia.
-Se construirán ciudades en el fondo del mar.
-La mitad de los animales que conocemos hoy, desaparecerán completamente.
-y habrá por lo menos un arma letal en cada hogar del mundo.
Sin tener la bola mágica puedo pronosticar hasta el fin de la humanidad como la conocemos hoy en día.
Con la tecnología actual se tratará asimismo de Generar un Idioma universal basado en Símbolos. “jeroglíficos”. Los cuales ya están siendo utilizados como idioma en la gente joven gracias a los mensajes de texto.
La vigilancia externa como la conocemos con cámaras en todas las ciudades será registrada por un sistema único de vigilancia llamado “un ojo que todo lo verá”.
Los recursos alimentarios serán tan escasos que el ser humano tendrá que buscar alimentos esenciales y aprender a procesar alimentos y tratarlos como ofrendas de vida o sea “sacrificios”.
Al final y gracias a un arma altamente destructiva ocurrirá algo realmente desastroso; mas el único elemento en la tierra que podrá sobrevivir a esa destrucción será la “Piedra”………………….
Miles de años después llegará nuevamente ese ser que abandonó la tierra en naves como si fuese un extraterrestre y la poblará con los pocos vestigios de civilización que encontrará; generará nuevas civilizaciones y quedarán en el recuerdo parte de lo que se vivió en la tierra; pero lamentablemente con el correr del tiempo la sabiduría que se alcanzo será guardada por algunos y oculta para que ese conocimiento no genere más destrucción en la tierra. El poco conocimiento será compartido por algunos que querrán gobernar esa nueva civilización, pero con el tiempo serán tan pocos que quedarán en el olvido y los habitantes nuevos con herramientas muy rudimentarias los llamarán “Dioses”.
¿Nos suena conocida esta historia?
En realidad, esto fue un sueño que tuve; pero se imaginan que quizás si pudo ocurrir?
Bueno ante una destrucción total en mi sueño vi que el único elemento que quedo sobre la tierra fue la piedra. La misma que perdura al tiempo, a sus inclemencias y al mismo hombre. Esa piedra quizás que algunos nos esmeramos en trabajar y que quizás es la única que sobrevivirá a este fin del mundo representado por el fin de los valores, el fin del respeto y el fin de una vida espiritual, que va destruyendo al ser humano, menos a esa piedra o a ese hombre que se hizo una piedra pulida y difícilmente se desintegrará………………………pero claro, eso fue solo un pequeño sueño.

viernes, 21 de diciembre de 2012

cuento de navidad




CUENTO DE NAVIDAD
Son las doce de la noche y el ruido de los fuegos artificiales en la calle ensordecen a cualquiera, el abrazo, el brindis y lo más importante que me recuerda Marcelo mi hijo de tres años: “¡¡Papá este año me toca poner el niño Jesús en el Nacimiento!!!”.
Con una gran sonrisa le alcanzo esa pequeña figura que representa aquel niño envuelto en un trapo casi desnudo llegando a la vida terrenal. Parados alrededor del Nacimiento se corren las lágrimas de mi esposa; pensando en que la emoción la embargaba, la abrazo y le pregunto: ¿Sentimentalismo Navideño?
No-me responde- no tuve tiempo de comprarte un regalo de Navidad.
Una gran carcajada y la miro a los ojos: Pero si nunca te he pedido nada; ha sido un año complicado y difícil, ha habido muchos gastos y hemos tenido muchos proyectos en los que hemos invertido; que mas regalo que estar todos juntos hoy?
Sin embargo sabia que la tristeza de no poder darme algo material esa noche le genero esa pequeña angustia.
Luego de abrir todos los regalos de los chicos que llenaban la sala nos quedamos mirándonos; ya no había más paquetes bajo el árbol; solo un pequeño sobrecito. La mire a los ojos y le dije; pues yo sabía que no tenias dinero para comprarme algo “caro y costoso” y conociéndote supuse que optarías por mejor no darme nada, así que yo te entrego esto.
Sorprendida abrió el sobre y había una tarjeta de Crédito con su nombre y con su foto y en letras impresas decía: Credi-amor.
Sorprendida y entre sollozos me pregunto que era lo significaba esa tarjeta?- Pues es una tarjeta con la que me vas a comprar mi regalo de Navidad - le dije.
-Jajaja, estás loco esta tarjeta es de mentira y tú la has hecho. Respondió entre lágrimas y risas.
“Ah me olvide de darte la hoja de instrucciones de esa tarjeta- le alcance un papel en donde decía todo lo que podía comprar con aquella tarjeta de Crédito Ficticia que mande a imprimir.
Agarro el papel y empezó a leer:
1. Esta tarjeta que usted posee desde este momento tiene una línea de crédito ilimitada.
2. Los establecimientos donde es aceptada es en todo el mundo.
3. Tiene descuentos del 50% en cada regalo para su esposo.
En ese momento interrumpí y le pregunte. ¿Te hace feliz eso?
No-me dijo - para que quiero tanto dinero?
Bueno entonces sigue leyendo:
Sus reembolsos serán del 100% cuando usted compre:
1. Una sonrisa de un hijo
2. Un abrazo de un hijo
3. Una lagrima de un hijo
4. Un triunfo de un hijo
5. Un resfrió de un hijo
6. Un “te amo” de un hijo
7. Un “gracias” de un hijo”
8. Una buena nota de un hijo
9. Una noche de películas con un hijo
10. Una cena con un hijo.
Nota: Sus puntos de felicidad acumulados se duplicaran por cada hijo que usted tenga.
Las lágrimas de mi esposa empezaron a correr por sus mejillas enrojecidas por la sorpresa, alzo su mirada y antes que me dijera nada interrumpí:
“Esa tarjeta sirve para que compres todo eso para mí, pero si te das cuenta ya me lo has regalado, el mejor regalo que me has podido dar es todo eso, mis hijos…………esa tarjeta por eso no tiene límites ni fecha de caducidad; esa tarjeta ya esta pagada con tus acciones y con tu vida. Gracias por el regalo de Navidad más lindo que me has hecho!!”
En ese momento rompimos en un abrazo como si no nos hubiésemos visto en años; de pronto sentí la mano de Marcelo que me jaló la camisa y con sus ojos negros y profundos me pregunto: ¿Te trajo algo Santa Claus?
Me agache hasta estar a la altura de sus ojos lo mire firmemente y le dije: “Me ha traído dos hijos Maravillosos”……. Con una gran sonrisa Marcelo se fue corriendo a ver a su hermano Mayor y emocionado le dijo: “Joaquín……………Santa nos ha traído Gemelos!!!!”
Feliz Navidad Para todos ustedes

viernes, 30 de noviembre de 2012

Cuento: el soldado de plomo

EL SOLDADO DE PLOMO
M:.M:. Gerardo Antonio Bouroncle Mc Evoy
Ayer por la noche y luego de un día de esos muy agotador, mi esposa se sentó junto a mí y me dijo que había sacado ya todas las cajas con los adornos navideños del depósito; que los revise y vea cuales renovamos y cuales desechamos; obligado casi me incorpore de mi adorable sillón del cual nunca he podido disfrutar de más de 5 minutos y me dirigí a ver aquel acumulo de cajas en el living.
Una a una iba abriendo las cajas hasta que me topé con una pequeña cajita con un muñeco muy curioso “un soldado de plomo”; casi había olvidado que mi Madre lo había encontrado en su baúl de recuerdos y me lo había enviado envuelto en esa cajita en la navidad del año pasado, cosa que no solo hizo que suelte unas lagrimas sino que me hizo volver a mi niñez un momento; aquel soldado ahora todo doblado y casi despintado, en aquella época formaba parte de un batallón de 30 soldaditos que mi padre me obsequio al cumplir los 7 años.
Un tesoro incalculable de recuerdos y anécdotas de aquel sobreviviente soldado se me vinieron a la mente. Qué bello es recordar pero a la vez que triste es tambien evocar. Dicen que nuestros recuerdos y vivencias quedan en una parte del cerebro llamada la amígdala, ahí está todo lo que hemos visto saboreado y olido. Cuando entramos en contacto nuevamente con esa sensación pues inmediatamente se enciende y le avisa al cerebro que busque la información adecuada y nos viene el recuerdo de ese objeto o sabor u olor. Es decir que no solo recordamos el objeto sino todo lo que ello implica en ese momento; ese soldado de plomo me hizo recordar ese olor exquisito a pavo horneado de mi madre y el inconfundible olor a Panetón navideño, en pocos segundos ya estaba con el sabor en mi lengua, pero a la vez la nostalgia de los años vividos, del niño inocente que esperaba ese regalo navideño después de un largo año de escuela y de pruebas constantes con el único fin de llegar a la navidad siendo un niño bueno y merecedor de regalos como un premio al esfuerzo desplegado en la escuela, en la casa y en la calle.
Siempre llegaba el inventario de mamá y papá: ¿fuiste un niño bueno y obediente en todo el año?....................la respuesta siempre fue SI.
Ese año en particular tuvo un significado muy peculiar no solo por el regalo de mi padre que fueron los soldados de plomo, sino porque ocurrió un hecho muy lamentable en la familia, el hijo mayor de mi tía Inés; la hermana de mi mamá, tuvo un accidente automovilístico y falleció a sus 23 años. El Luto familiar hizo de aquella navidad una celebración muy austera en comida y en regalos. Los ánimos definitivamente no estuvieron muy a la orden del día.
Hoy por la mañana y sentado nuevamente en el living y revisando los adornos navideños mi esposa notó un poco mi melancolía al tener ese soldadito de plomo en mi mano.
¿Pasa algo? Me dijo. - Recordé lo del primo Carlos y lo de su accidente- respondí- casi había olvidado lo que ocurrió aquella navidad. Hoy se cumplen 40 años de aquel terrible suceso.
Por la noche nos dispusimos a ir a la misa conmemorativa de mi primo, al ver a la tía Inés la abrace muy fuerte, me apretó como no queriendo que me vaya, luego me miro directamente a los ojos y me pregunto: ¿cómo están tus hijos? Sus ojos verdes se encendieron al responderle: acá están, los he traído para que te saluden. Muy contenta comenzó a buscar entre todos los familiares cuales eran y casi inmediatamente encontró a mi hijo Joaquín, con una gran sonrisa le dijo: ¡tienes la cara de tu Padre!.
Generalmente cuando nos encontramos con nuestros familiares expresiones como esta salen por doquier, Joaquín un poco serio le dijo: en realidad todos dicen que me parezco a mamá.
La tía Inés empezó a reír, y le dijo: en realidad tienes de los dos, pero siempre tendrás expresiones tanto de tu padre como de tu madre, eso también te hará único siempre!. En ese momento empezaron a correr lagrimas por las mejillas de la tía Inés y sus ojos verdes cambiaron de color, se tornaron oscuros al mezclarse con el rojo, antes blanco de sus escleras, agarro a Joaquín muy fuerte y lo abrazó, lo miro y le dijo: ¡gracias por venir y ayudar a curar mi cicatriz, espero que todos los años vengas a recordar a tu tío aunque nunca lo conociste.
Ya en la casa traté de sentarme en mi sillón cuando en la escena Joaquín irrumpió: ¿Papá porque la tía Inés dice que tiene una cicatriz?
Bueno le dije: Ves la cicatriz que tu mamá tiene en el hombro y que no la deja mover su brazo izquierdo correctamente?
"Pues bien; tu mamá tuvo un accidente automovilístico hace 20 años también y estuvo en estado crítico casi 10 días, en aquella oportunidad casi muere, pero se salvo, sin embargo le quedo aquella enorme cicatriz que la ha limitado en algunas funciones con su brazo izquierdo. Sin embargo eso no ha impedido que siga adelante, no impidió que me enamorara de ella, no impidió que nos casáramos, ni que tengamos dos hijos maravillosos que ella ha criado correctamente; nadie podría decir que esa cicatriz y su limitación le impidieron seguir con su vida como cualquier persona". Continué:
La tía Inés también sufrió un accidente indirecto; mi primo falleció; y la cicatriz le quedo a ella en el corazón, sin embargo eso no ha impedido que siga viviendo; quizás al igual que tu mamá con algunas limitaciones, pero tenemos el resto del cuerpo intacto y útil. Es por eso que ella te dijo que tiene una cicatriz, nunca se borrará, siempre la tendrá ahí, mas no es un impedimento para seguir con vida.
Con los años, muchos tenemos desde pequeñas cicatrices que no se notan hasta grandes que son muy evidentes, algunas externas y otras internas, sin embargo no son un obstáculo para seguir adelante, muy por el contrario son marcas que adquirimos y que de una u otra forma nos recuerdan constantemente las experiencias vividas, nunca las borraremos, serán eternamente un modo de ver hacia atrás lo que nos toco vivir y lo que debemos aprender.
Metí mi mano al bolsillo y saque mi soldadito de plomo: ¿ves este pequeño soldado?- Casi admirado mi hijo no tenía la menos idea de lo que era - Este es un soldado de plomo, un juguete de mi infancia, es también como un pequeño recordatorio para mí de lo que en aquel momento viví. Los regalos que recibimos a lo largo de nuestra vida son las cicatrices que no están en nuestro cuerpo, son objetos que generalmente nos evocan recuerdos gratos; la vida está llena de momentos buenos y de momentos amargos; el cuerpo recibe los amargos en forma de heridas que posteriormente serán cicatrices, y en algún lugar mágico de nuestra mente quedan los buenos momentos, para ello son los objetos que recibimos como regalos, son como pequeños símbolos que nos hacen conectar nuestra mente y sacar un recuerdo lindo de ahí y que generalmente viene acompañado de una expresión facial como por ejemplo: una sonrisa.
Toma este soldado y guárdalo, a mi me acompaño en mis aventuras infantiles, ahora te acompañará a ti en un recuerdo de lo que sucedió hoy que se que nunca olvidarás.

miércoles, 31 de octubre de 2012

Cuento: la pérdida de un hijo

LA PÉRDIDA DE UN HIJO
M:.M:. Gerardo Bouroncle Mc Evoy
Uno de los recuerdos más bellos de mi infancia siempre fueron los viajes por carretera en nuestro Chevrolet del ‘69, de color azul intenso, con sus alerones atrás y esos faros gigantescos que me hacían pensar a mis 10 años de edad que me transportaba en una nave espacial; la velocidad por aquella época ni siquiera se tomaba en cuenta, creo que Papá iba como a 120 km por hora. Y a pesar de lo amplio y cómodo de aquel bólido, siempre íbamos apretados, mis tres hermanos, la abuela y mi viejo pastor alemán. Las travesías en aquella gigantesca Nave motorizada hacia volar mi imaginación cuando apreciaba el paisaje por la ventana: los cerros, los arboles y el campo verde como una alfombra recién sacada de la fabrica.
Las paradas obligadas cuando viajábamos al Sur eran siempre en Ica a almorzar, la llegada a Camaná por la noche donde había que cenar y aquel hotel de turistas en donde pernoctábamos. Había un cine viejo y de fachada de madera en aquel lugar, con películas llamadas para Adultos en aquella época del gordo Porcel, que eran el deleite de mi padre; salía muerto de carcajadas con mi madre, mientras nosotros esperábamos en el hotel bajo la vigilancia de mi abuela a quien no se escapaba ni un solo detalle. Era la primera vez que la abuela nos acompañaba a Arequipa su tierra natal.
Un día le pregunte a la abuela del porque abandono Arequipa y se fue a lima. Sonriendo me dijo que el motivo principal que la tenia viviendo allí ya no estaba. Ese motivo era mi abuelo que murió a los 54 años, aun con una vida por delante, presa del Cáncer al pulmón pasó los últimos días de su vida pegado con un tubo de oxigeno y pidiéndole perdón a mi abuela por haber fumado tanto.
“Sé que aun hay dos chicos en casa” -le dijo el abuelo; pero los más grandes ya están listos para enfrentar la vida.
Por aquella época la abuela tenía al tío Jorge de 6 años y a mi tío Alfredo de 12. Casi un año después de la muerte del abuelo Jorge murió de una fuerte neumonía. La abuela aterrada cogió sus maletas, lo que pudo y se fue de su bella Arequipa, dejando lo único que la ataba allí que eran 2 ataúdes con la mitad de su vida. Nunca volvió.
Yo siempre le decía que debería volver, se negó siempre hasta este viaje en que a regañadientes y bajo la presión de mi padre subió al auto con nosotros y después de muchas horas de viaje volvió a ver aquel hermoso volcán con su cúpula de nieve imponente y majestuoso como dicen los lugareños. La abuela al entrar a la ciudad empezó a llorar con un sentimiento de culpa como si ella misma le hubiese quitado la vida a aquellos seres tan amados.
No llores - le dije; yo estaré contigo en todo momento. Me miró muy tiernamente me acaricio la cabeza con sus pequeñas manos temblorosas y acercándose de apoco llego a mi oído diciendo: nunca me abandones, espera siempre que yo me vaya y no tú. Además no es buena educación dejar a una persona mayor sola.
En aquel momento no entendí para nada el significado de las palabras de la abuela, sin embargo la abrace muy fuerte y le dije que nunca la abandonaría, que siempre estaría a su lado.
Y creo que con el tiempo cumplí mi promesa de a poco; pasaba largas horas sentado frente a aquella señora que con una catarata galopante en sus ojos no paraba de frotárselos para alcanzar a ver algo. Por las tardes tenía que leerle las noticias en el diario, esto empezó a generar en mi el habito de la lectura, leía noticias internacionales y de apoco también conocí el mundo sin querer, los países, los presidentes, la ONU, en fin tantas cosas que a los niños de mi edad les importaba muy poco.
Con el correr del tiempo entre a la facultad de Medicina y ya no solo no tenía tiempo para mí sino que las visitas a la abuela se hicieron muy espaciadas. El deterioro en su salud la llevaron a postrarla en una cama clínica instalada en su habitación, el inmobiliario paso a convertirse en un pequeño hospital, lleno de enfermeras, sueros colgantes, sondas y ese olor a desinfectante que solo percibía en mis practicas del hospital.
Mi abuela vivía casi fuera de su realidad, un día me senté con ella al borde de su cama; me miro con la mirada perdida pero con un afán de encontrar en mi rostro algo familiar, como perdida en el tumulto de la gente tratando de ubicar un rostro conocido para sentirse protegida, las lagrimas empezaron a correr por sus mejillas ojerosas por el paso agotador de los años……………..soy yo abuela!! Le dije.
Empezó a sonreír: no me abandonaste - me dijo.
Claro que no, te lo prometí un día y aquí estoy. Me respondió: Bueno entonces es hora de que yo me vaya, eres un niño educado, aprendiste mucho; ahora si estoy contenta contigo Jorge, ya te perdone por que aquella vez te fuiste antes que yo.
Mis lagrimas no pararon frente a aquella señora, su vida se estaba yendo de a poco; fue entonces que entendí el dolor tan grande que pudo haber sentido con la partida del tío Jorge a sus 6 años de edad, el dolor que la llevo el resto de su vida por tamaña pérdida y el sentimiento de vacio al perder un hijo, comprendí recién porque se tuvo que ir y abandonar todo lo que tenia y empezar de nuevo.
Por la tarde me senté frente al televisor y mis dos hijos se sentaron frente a mi; los abrace muy fuerte y les dije: “recuerden siempre que la vida es un proceso de aprendizaje, hoy estoy aprendiendo con ustedes a ser papá y ustedes a ser hijos, estamos todos aprendiendo a vivir en armonía, si uno faltase esa armonía se quebraría; mi aprendizaje de padre terminara el día que yo me vaya; es por eso que los cuido tanto porque en el camino yo estoy delante de ustedes y nunca me pasen por mas sabiduría que alcancen, yo estaré delante de ustedes, pero no por saber más sino para aligerarles ese camino.
Mi abuela me enseño a comprender algo del dolor de una Madre al perder un hijo. Hoy sentado en mi puesto en Logia recordé eso Mismo; el dolor que podemos sentir cuando un Hermano se va, el dolor de mi Madre Logia al ver partir un hijo………………………………………..sobretodo: sin despedirse.

jueves, 18 de octubre de 2012

Cuento: El pan con mantequilla de mi abuela

EL PAN CON MANTEQUILLA DE MI ABUELA
M:.M:. Gerardo Bouroncle Mc Evoy
Los aromas y olores son algo que al ser humano lo han cautivado desde siempre, no solo nos enseñan a diferenciar los elementos de la naturaleza, nos enseñan también a identificar y a conocer gracias a la nariz nuestros alimentos e inclusive a las personas. El olor es algo que activa muchos centros neuronales en nuestro cerebro, uno de ellos que definitivamente se pone de manifiesto cuando podemos percibir un aroma es el del recuerdo y la remembranza; el olor es capaz de transportarnos a miles de kilómetros a una ciudad, como también a muchos años atrás en nuestras vidas hasta nuestra propia niñez.
Al oler ese pan por las tardes en la panadería de la esquina barranquita donde viví, mis años de infancia traen a mi mente instantáneamente a mi abuela sentada en la mesa del comedor preparándome ese manjar exquisito que en aquella época era esperado todas las tardes por mi y que hoy en día no pasa de ser un simple pan con mantequilla.
Mi abuela tenía el ritual de sentarse en la mesa partirlo con delicadeza y escuchar suavemente como ese crujido del pan hacía brillar mis ojos. Untar esa mantequilla casera que ella misma se encargaba de preparar juntando todas las natas de la leche de vaca que cada tarde el lechero llevaba en aquellas botellas de vidrio que dejaba en la puerta de mi casa.
Cuantos recuerdos se vienen a mi mente avivados solo por un insipiente aroma de pan; cuantos sentimientos se despiertan en mí al tratar de aclarar mis pensamientos y ubicarme nuevamente en aquella silla de madera del comedor de la abuela. Recordar dicen que es volver a vivir; yo creo que recordar es no dejar de vivir, es alimentar nuestra mente no solo con aquel sencillo pan con mantequilla, sino refrescar nuestra mente con los colores de aquel escenario, volver a ver los ojos de la abuela…………. cansados, con arrugas en los costados por haber parpadeado durante tantos años, abriéndose y cerrándose, aceptando y negando situaciones de la vida cotidiana, aprendiendo de ellos y quedando marcados en aquellas patas de gallo como condecoraciones de guerra por haber sobrevivido al tiempo.
Sentado en aquella silla vuelven las palabras de aquella señora sabia, que con los años fue perdiendo la memoria pero que seguía con su ritual del pan con mantequilla, porque sabía en su interior que alguien necesitaba alimentarse de ella, de sus manos, de su sabiduría y de su amor. Las historias que ahí me contaba parecían salidas del mejor libro de relatos digno ganador de un premio nobel; historias del abuelo, de mi padre cuando era niño, de la vida y la sociedad de su época, de las esperanzas y sentimientos de una chica adolecente de los años treinta. Como no recordar por lo menos una enseñanza suya en cada untada de mantequilla en aquel pan que era enriquecido por los constantes comentarios de una familia que enfrentaba la vida de una manera distinta, solo con lo que tenían a la mano, con la tecnología de un teléfono a cuerda y con una operadora del otro lado; con un automóvil solo utilizado los fines de semana porque el resto de días el abuelo iba a caballo a trabajar.
Cuánto hemos avanzado y cuanto no hemos aprendido, hoy llegamos a Marte, pero no somos capaces de llegar a la otra esquina sin un teléfono en el bolsillo; cuantas veces escuche la misma historia de la abuela contando que mi abuelo se sacó una muela con un viejo alicate y una botella de pisco; en aquel entonces me parecía una historia de terror, hoy que la recuerdo me parece la historia más tierna del mundo porque puedo comprender algo, de cómo era el temperamento y carácter de aquel señor que solo conocí los primeros años de mi vida y del que tengo un vago recuerdo; solo lo imagino sentado en aquel tronco en el patio trasero de la casa bebiéndose esa botella de licor y sacándose la muela. Qué acto tan heroico y a la vez tan absurdo.
Hoy por la tarde me senté a la mesa con un pan crujiente entre mis manos, quizás no tanto como el de mi abuela, pero en cada sonido escucho su voz; entrecortada y temblorosa los últimos años de su vida, preguntándome una vez más como me llamo y quién soy? Para luego darme ese pan con mantequilla con sus manos envejecidas por el trabajo y manchadas por el sol que cada mañana iluminaba su mente y ensombrecía su cuerpo.
Era entonces Un niño de diez años que no entendía esa enfermedad que le iba borrando la mente de a poco y esos bellos recuerdos que se le esfumaban trataba incansablemente de contármelos como si quisiese aferrarse a ellos, repitiéndolos para poder preservarlos en el tiempo y no se olviden ya que son el legado más grande de mi familia……………………..sus recuerdos y mis recuerdos.
¡Feliz cumpleaños abuela!.......hoy 100 años después de tu nacimiento, no puedo dejar de tenerte presente, recordando cada historia y anécdota que me contaste y que enriquecieron y alimentaron mi espíritu y mi vida, cada una de ellas han marcado el rumbo en mi accionar; el legado que uno tiene muchas veces no es leído de manera adecuada, pero cuando abrimos aquel libro de recuerdos, pues esa historia es nuestra, está en nuestros antepasados pegada en nuestros genes porque somos lo que ellos forjaron, somos la herencia viva de nuestros padres, somos la sucesión de la vida. Uno siempre está en el lugar indicado y en el momento indicado, a mi me toco estar con aquella señora de cabellera blanca y amarrada con una vieja liga en su pequeña cabeza, con manos temblorosas y al final de su vida casi temerosas de cortar un simple pan para no hacerse daño; pero siempre con una historia que mantuvo vivo mis ganas de luchar, porque ella llego ahí también en el momento indicado para poder enseñarme lo que es ser una persona Buena.

martes, 16 de octubre de 2012

El Masón que no conoces


EL MASÓN QUE NO CONOCES
M:.M:. Gerardo Bouroncle Mc Evoy
Hermano Aprendiz, desde vuestra columna vais a apreciar casi a todos lo HH:. de tu logia, mas habrá uno que todavía no lo vais a ver, ese Hermano ira apareciendo cual espectro fantasmal hasta cobrar materialidad. Pero siempre deberás estar alerta y muy atento ya que en cualquier momento aparecerá, es por ello que se te encomienda una tarea ardua que es obedecer y callar; dentro de poco y con mucho trabajo podrás ver realmente al Masón que no conoces.
En cada tenida notarás siempre que hay un lugar vacio, ahí estará el Hermano del que te hablo, aparecerán primero sus piernas, que te harán recordar que a la entrada de la Logia hay dos columnas, serán el soporte de aquel Masón que no conoces.
Conforme pase el tiempo el tronco de aquel hermano se materializará, notaras también que es el lugar en donde se coloca el mandil, el trabajo tuyo es seguir observando, a pesar de que algunos hermanos distraigan tu mente, seguirás abriendo cada vez mas tus ojos a aquella aparición; nunca lo pierdas de vista, quizás escuches algunos comentarios que hagan que atención se pierda en otro punto de la logia; mas te recomiendo que regreses siempre a ese asiento en donde está sentado ese Masón que no conoces.
Algunos hermanos tratarán de hacer reflejar sus medallas en el pecho para que tu vista se distraiga y pierdas la claridad de lo que debes realmente tienes que ver; pues no dejes que ese brillo te haga parpadear, es un brillo realmente indirecto, la verdadera luz debe ir directo a tus ojos y no debe ser reflejada en ningún objeto que lo lleve a tu vista, porque podrías perder la visibilidad y perder de vista a ese Masón que no conoces.
Si tu trabajo es intenso y esmerado iras notando que ese cuerpo del Hermano se completará de a poco, aparecerán sus brazos y manos, verás en cada uno de ellos herramientas a trabajar, te enseñará que cada una cumple una función y que necesitas de las dos manos para complementarlas, las primeras que le notarás son un cincel en una mano y un mazo en el otro; luego y sucesivamente aparecerán en sus manos el resto de herramientas que complementarán su trabajo, ese es el momento en que la figura del hermano está casi completándose y aparecerá como por arte de Magia el Masón que no conoces.
Sin embargo, el rostro todavía se hace difuso, necesitas afinar mucho la vista, primero porque en ese momento un Hermano hará mucha bulla y dirá cosas que despertarán tu ira, tu enojo y tu tolerancia se irá al suelo, mas no desmayes porque es una prueba más como las de tu iniciación, ese hermano tiene un fin muy grande va a hacer que te pongas de pie abras tu boca y descubras al Mason que no conoces…………….
Ya sabes quién es?.....................¡si,…………eres tú!, eres ese Masón que ante la crítica, la ofensa, las malas actitudes y la arrogancia no se ha dejado vencer, has aprendido que el Verdadero Masón lo vas a trabajar tu, día a día, golpe a agolpe con ese cincel y ese martillo; que sirven estas herramientas para golpear tus imperfecciones y no las del otro hermano ya que él utilizó esas herramientas no para pulir sus impurezas sino para tratar de salpicarlas hacia ti.
Ese Masón que no conoces ya te lo puedo presentar y eres tú, has logrado sacar lo mejor de ti, entonces a partir de hoy ese lugar que estuvo vacio y que fue siendo ocupado por un hermano que aparecía de a pocos cual fantasma, ya cobro vida.
Hoy querido Hermano quizás cambies de columna y notarás otro sitio vacio, te preguntaras Ahí también hay un Mason que no conozco?
Pues te diré, ese sitio ahora tiene un espejo y es tu reflejo, es lo que has logrado hasta el día de hoy, quizás se convierta en tu enemigo porque lo que reflejes allí puede ser visto por los demás. Pero es tu reflejo y no el de otro hermano; cada uno tiene un espejo allí en frente…………………………………¿Que quieres reflejar?
Este es el momento en que si tu imagen y tu trabajo han sido contantes, empezaras a emitir una buena imagen primero para ti y luego al resto; pero si trabajas un poco más empezaras a ver el reflejo de los demás hermanos:
- El del que habla sin sentido.
- El que ostenta las medallas que tiene en su pecho.
- El que quiere que todos lo alaben.
- El que necesita un aplauso.
- El que nunca asiste.
- El que nunca presenta un trabajo y critica el tuyo.
- y el que aún se sienta muy cómodo por ahí………………………….El que no sabe pedir Perdón por su mala actitud.
Pero aun falta algo; ese espejo si lo giras un poco no te reflejará a ti, sino a ese hermano que tú no quieres ser; Hoy en nuestra tenida siéntate derecho y firme, levanta tu mirada y trabaja como él Masón que acabas de descubrir que eres, mira tú espejo y sonríe porque tu imagen será reflejada al Universo.
Octubre del 2012 e:.v:.
R:.L:.S:. Integración N° 149
Vall:. de Lima Or:. del Perú