CUENTO DE NAVIDAD
Son las doce de la noche y el ruido de los fuegos artificiales en la calle ensordecen a cualquiera, el abrazo, el brindis y lo más importante que me recuerda Marcelo mi hijo de tres años: “¡¡Papá este año me toca poner el niño Jesús en el Nacimiento!!!”.
Con una gran sonrisa le alcanzo esa pequeña figura que representa aquel niño envuelto en un trapo casi desnudo llegando a la vida terrenal. Parados alrededor del Nacimiento se corren las lágrimas de mi esposa; pensando en que la emoción la embargaba, la abrazo y le pregunto: ¿Sentimentalismo Navideño?
No-me responde- no tuve tiempo de comprarte un regalo de Navidad.
Una gran carcajada y la miro a los ojos: Pero si nunca te he pedido nada; ha sido un año complicado y difícil, ha habido muchos gastos y hemos tenido muchos proyectos en los que hemos invertido; que mas regalo que estar todos juntos hoy?
Sin embargo sabia que la tristeza de no poder darme algo material esa noche le genero esa pequeña angustia.
Luego de abrir todos los regalos de los chicos que llenaban la sala nos quedamos mirándonos; ya no había más paquetes bajo el árbol; solo un pequeño sobrecito. La mire a los ojos y le dije; pues yo sabía que no tenias dinero para comprarme algo “caro y costoso” y conociéndote supuse que optarías por mejor no darme nada, así que yo te entrego esto.
Sorprendida abrió el sobre y había una tarjeta de Crédito con su nombre y con su foto y en letras impresas decía: Credi-amor.
Sorprendida y entre sollozos me pregunto que era lo significaba esa tarjeta?- Pues es una tarjeta con la que me vas a comprar mi regalo de Navidad - le dije.
-Jajaja, estás loco esta tarjeta es de mentira y tú la has hecho. Respondió entre lágrimas y risas.
“Ah me olvide de darte la hoja de instrucciones de esa tarjeta- le alcance un papel en donde decía todo lo que podía comprar con aquella tarjeta de Crédito Ficticia que mande a imprimir.
Agarro el papel y empezó a leer:
1. Esta tarjeta que usted posee desde este momento tiene una línea de crédito ilimitada.
2. Los establecimientos donde es aceptada es en todo el mundo.
3. Tiene descuentos del 50% en cada regalo para su esposo.
En ese momento interrumpí y le pregunte. ¿Te hace feliz eso?
No-me dijo - para que quiero tanto dinero?
Bueno entonces sigue leyendo:
Sus reembolsos serán del 100% cuando usted compre:
1. Una sonrisa de un hijo
2. Un abrazo de un hijo
3. Una lagrima de un hijo
4. Un triunfo de un hijo
5. Un resfrió de un hijo
6. Un “te amo” de un hijo
7. Un “gracias” de un hijo”
8. Una buena nota de un hijo
9. Una noche de películas con un hijo
10. Una cena con un hijo.
Nota: Sus puntos de felicidad acumulados se duplicaran por cada hijo que usted tenga.
Las lágrimas de mi esposa empezaron a correr por sus mejillas enrojecidas por la sorpresa, alzo su mirada y antes que me dijera nada interrumpí:
“Esa tarjeta sirve para que compres todo eso para mí, pero si te das cuenta ya me lo has regalado, el mejor regalo que me has podido dar es todo eso, mis hijos…………esa tarjeta por eso no tiene límites ni fecha de caducidad; esa tarjeta ya esta pagada con tus acciones y con tu vida. Gracias por el regalo de Navidad más lindo que me has hecho!!”
En ese momento rompimos en un abrazo como si no nos hubiésemos visto en años; de pronto sentí la mano de Marcelo que me jaló la camisa y con sus ojos negros y profundos me pregunto: ¿Te trajo algo Santa Claus?
Me agache hasta estar a la altura de sus ojos lo mire firmemente y le dije: “Me ha traído dos hijos Maravillosos”……. Con una gran sonrisa Marcelo se fue corriendo a ver a su hermano Mayor y emocionado le dijo: “Joaquín……………Santa nos ha traído Gemelos!!!!”
Feliz Navidad Para todos ustedes
No hay comentarios:
Publicar un comentario